Cuidados Esenciales (Nivel Principiante)
Manteniendo estos fundamentos, tu Orquídea Red Eye se mantendrá feliz y saludable:
Luz
Coloca tu orquídea en una ubicación con luz indirecta brillante o semisombra. Evita el sol directo sobre sus hojas y flores, especialmente en las horas centrales del día, ya que podría quemarlas. Un sitio ideal es cerca de una ventana orientada al este o al norte, donde reciba claridad suave por la mañana. Si notas que sus hojas se oscurecen demasiado, puede que necesite un poco más de luz; si amarillean, posiblemente está recibiendo exceso de sol.
Riego
Menos es más en el caso de las orquídeas. Riega tu Red Eye aproximadamente una vez por semana. Antes de regar, toca el sustrato con el dedo: debe estar seco en la superficie. Es preferible quedarse corto que pasarse con el agua – el enemigo #1 de las orquídeas es el encharcamiento. Cuando riegues, hazlo por la mañana y evita que el agua se acumule en la corona (la unión de hojas), ya que podría provocar pudrición. Un método recomendado es el riego por inmersión: coloca la maceta (con orificios de drenaje) en un recipiente con agua durante 5-10 minutos, deja que las raíces absorban lo necesario y luego escurre bien la maceta.
Humedad
Las orquídeas Phalaenopsis disfrutan de humedad ambiental moderada (alrededor de 50-70%). Si vives en un ambiente seco, puedes aumentar la humedad colocando la maceta sobre una bandeja con guijarros húmedos (sin que el fondo toque el agua) o pulverizando ligeramente agua alrededor (nunca directamente sobre las flores). En la mayoría de hogares, la humedad normal funciona, pero evita corrientes de aire muy seco o calefacciones pegadas a la planta.
Temperatura
La Red Eye se siente a gusto en temperaturas similares a las nuestras en casa. Lo ideal es entre 16°C y 24°C. Puede tolerar ocasionalmente hasta 30°C o mínimos de 14°C, pero no cambios bruscos. Protégela de corrientes de aire frío (por ejemplo, cerca de ventanas en invierno) y de fuentes de calor intenso directo. Un pequeño descenso nocturno de ~5°C respecto al día puede estimular futuras floraciones, imitando su entorno natural.
Sustrato y Maceta
Tu orquídea viene en un sustrato especial para orquídeas, compuesto de corteza de pino y fibras que imitan cómo crecería en la naturaleza (sobre troncos de árbol). No uses tierra común para esta planta; sus raíces necesitan mucho aire. La maceta transparente de 12 cm en la que viene no es casualidad: permite que veas las raíces (que, cuando están hidratadas, se ven verde brillante) y controlar la humedad. Además, las raíces de la Phalaenopsis también hacen fotosíntesis, ¡así que la luz a través de la maceta les viene bien! No trasplantes tu orquídea recién llegada; puede permanecer en esa maceta por lo menos un año. Solo considera trasplantar cuando el sustrato esté muy degradado o la planta muy apretada, típicamente cada 1-2 años, preferiblemente tras una floración.
Nutrición
En sus primeros meses en casa no será necesario abonar si el sustrato es nuevo. Pasado un tiempo, puedes aplicar fertilizante especial para orquídeas diluido, aproximadamente 1 vez al mes en primavera y verano (periodo de crecimiento y floración). Usa un abono equilibrado 20-20-20 a 1/4 de la dosis recomendada, o fertilizantes orgánicos específicos. Nunca fertilices en exceso ni con la planta seca (riega ligeramente antes de abonar para no quemar las raíces). En otoño e invierno reduce o pausa la fertilización, dando a la planta un descanso.LuzTemperatura